Japón está a punto de perforar el fondo del mar para explotar minerales
Japón busca reestructurar su economía y abandonar los combustibles fósiles. Y ahora, el hallazgo de una megamina submarina podría acercarlo a alcanzar esa meta. De esta inmensa mina en el océano Pacífico, Japón podrá extraer cobalto y níquel, esenciales para vehículos eléctricos y dispositivos electrónicos, lo que podría disminuir su dependencia de China, actual líder en materiales críticos.
Cobalto y níquel
El yacimiento, ubicado a 5.700 metros de profundidad, contiene 610 mil toneladas de cobalto y 740 mil de níquel, suficiente para abastecer al país durante décadas. Este hallazgo, anunciado por la Universidad de Tokio y The Nippon Foundation, representa un 7% de las reservas mundiales de cobalto y posiciona a Japón como un fuerte competidor en la industria de las tierras raras, actualmente dominada por China y la República Democrática del Congo.
Tarea complicada
El principal desafío es la extracción de los metales, dada la gran profundidad del yacimiento. Japón planea desarrollar tecnologías para extraer hasta 3 millones de toneladas al año, lo que fortalecería su transición hacia un modelo energético sostenible y lo posicionaría como un actor clave en el mercado global de materiales críticos para energías renovables y dispositivos tecnológicos.