Evento de Carnia: la lluvia ininterrumpida que duró 2 millones de años
La lluvia fue constante durante aproximadamente 2 millones de años y muchos creen que fue determinante para el ascenso de la era de los dinosaurios.
Extinción masiva
El evento pluvial Carniano, también conocido como la Crisis del Carniano, marcó un período en la Tierra en el que la lluvia fue constante durante aproximadamente 2 millones de años. Este fenómeno, que ocurrió hace unos 234 millones de años, es considerado por muchos expertos como un factor clave en el ascenso de la era de los dinosaurios, que se prolongaría durante unos impresionantes 165 millones de años.
Durante el evento, la combinación de lluvia ácida y gases de efecto invernadero elevó las temperaturas del planeta, lo que resultó en la eliminación de especies menos adaptables al cambio. Aunque el evento de extinción más conocido es la colisión de un meteorito que llevó a la desaparición de los dinosaurios, el impacto del evento pluvial Carniano es posiblemente comparable a la del asteroide gigante.
Estudios científicos
Dos equipos de científicos examinaron sedimentos de arenisca gris y sedimento siliciclástico que se depositaron como resultado de lluvias persistentes. Estos sedimentos estaban enterrados a una profundidad que coincidía con el período anterior al dominio de los dinosaurios en la Tierra.
En 1973, Wolfgang Schlager y Wolfgang Schöllnberger publicaron un estudio que detallaba los hallazgos en una muestra de rocas sedimentarias de los Alpes orientales. En la década de los 80, otros dos científicos, Alastair Ruffel y Michael Simms, hicieron un descubrimiento similar en el Reino Unido. Además, se encontraron evidencias adicionales no solo en Europa, sino también en Asia, Australia y América.
Las causas
El evento pluvial de Carnia se desencadenó después de períodos prolongados de sequía, según la hipótesis principal, como resultado de una colosal erupción volcánica en la Provincia ígnea Grande de Wrangelina. Esta región se extendía desde el centro-sur de Alaska hasta las costas de la Columbia Británica. La erupción liberó grandes cantidades de vapor de agua que propiciaron la formación de nubes, desencadenando lluvias torrenciales.
En un estudio publicado por la Revista de la Sociedad Geológica se describe un escenario de extinciones masivas seguido por una proliferación de vegetación abundante. Según el artículo, "En el rastro de las extinciones masivas de plantas y herbívoros en tierra, los dinosaurios tomaron el escenario central, expandiéndose rápidamente en diversidad, impacto y alcance global".