Garum: la mítica salsa que conquistó al Imperio romano
El mundo gastronómico tiene grandes y apasionantes historias para contar. Una de ella tiene como protagonista al garum, una emblemática salsa a base de pescado que tuvo el imperio romano. Para su preparación, los cocineros mezclaban los peces con sal y se dejaban fermentar de forma natural durante meses.
Un aliado infaltable
En la Antigua Roma, el garum era el condimento que reemplazaba a la sal, ya que aportaba humedad a los alimentos y brindaba un sabor salado. De hecho, se añadían pequeñas cantidades para condimentar los platos y realzar los sabores, similar a lo que se hace actualmente con, por ejemplo, la salsa de soja.
Su uso medicinal y cosmético
Sin embargo, los romanos no solo utilizaban el garum para cocinar: datos históricos informan que era usado como medicina e incluso como cosmético. Según los registros arqueológicos, resultaba ser buen remedio para la disentería, úlceras, mordeduras caninas, estreñimiento o diarrea crónica. Asimismo, se utilizaba para eliminar pecas y vello no deseado.
Motivos de su desaparición popular
Por otra parte, el arqueólogo Claudio Giardino explicó que la desaparición de esta receta milenaria podría estar ligada a la fuerte suba de impuestos sobre la sal durante la caída del Imperio romano. El acrecentamiento del precio de garum hizo que su producción se vuelva inviable, generando una drástica reducción de su consumo popular.