Revelan que el telescopio James Webb descubrió una serie de misteriosos puntos rojos en el espacio
Los "pequeños puntos rojos" encontrados por el James Webb, son misteriosos objetos que podrían cambiar nuestra comprensión del universo temprano.
Pequeños puntos rojos
El telescopio espacial James Webb, lanzado en diciembre de 2021, ha dado un nuevo giro a nuestra comprensión del universo con el hallazgo de los misteriosos "pequeños puntos rojos" (LRD). Detectados por primera vez en 2022, estos objetos no se asemejan a estrellas ni cuerpos celestes conocidos, lo que ha generado gran interés en la comunidad científica.
Los Investigadores han recopilado una colección de LRD para analizar su origen y comportamiento, centrándose en aquellos ubicados en los primeros 1.500 millones de años tras el Big Bang. Expertos consideran que estos fenómenos podrían ser agujeros negros supermasivos con discos de acreción, capaces de alterar nuestra comprensión de las etapas iniciales del cosmos.
Misterios del universo
Los científicos han rastreado los LRD en bases como CEERS y NGDEEP, descubriendo que surgieron en abundancia 600 millones de años después del Big Bang, pero su número disminuyó rápidamente. Datos del 70% de los LRD revelaron gas orbitando a velocidades de hasta 1.000 kilómetros por segundo, reforzando la idea de que estos objetos están asociados a los agujeros negros.
Este hallazgo inicialmente preocupó a los astrofísicos, ya que, si los LRD fueran estrellas, significaría que ciertas galaxias crecieron más rápido de lo que las teorías actuales predicen. Sin embargo, su relación con agujeros negros mantiene vigente la teoría cosmológica, aunque los misterios en torno a su formación persisten.
Incógnitas y descubrimientos
El estudio presentado en la Sociedad Astronómica Estadounidense subraya la importancia de los LRD en la evolución temprana del universo. Así mismo, su observación permite explorar la relación entre los agujeros negros supermasivos y las galaxias en las etapas iniciales de su desarrollo.
Los investigadores esperan expandir estas investigaciones a mayores distancias y probar modelos más avanzados, confiando en que el telescopio James Webb continúe revelando secretos sobre estos enigmáticos puntos rojos y las dinámicas que moldearon nuestro cosmos.