Jurassic Park estaba equivocado: el tiranosaurio rex tenía labios y sus dientes no se veían

Aunque el tiranosaurio rex, y otros dinosaurios depredadores, han sido históricamente representados como bestias de dientes terroríficamente enormes, gigantes, tal cual pudo verse en el clásico del cine Jurassic Park (1993), tales representaciones parecen ser erróneas.

Un error histórico

Un equipo internacional de paleontólogos, sugiere que esta clase de dinosaurio tenía los dientes cubiertos por labios más bien delgados y escamosos, lo suficientemente extensos como para cubrir sus bocas hasta sellarlas.

Según el estudio de los investigadores, que se publicó en la revista científica Science, la familia de los dinosaurios terópodos, es decir, aquellos que caminaban en dos patas, como el T-rex y el velociraptor, tenían labios similares a los de los lagartos.

EL estudio más detallado

Esta investigación, la más detallada hasta hoy, examinó la estructura dental, sus patrones de desgaste y también la morfología de la mandíbula de los reptiles con labios y sin labios, para descubrir que la anatomía de la boca de los terópodos es más parecida a la de los lagartos, que a la de los cocodrilos.

“Es bastante notable lo similares que son los dientes de los terópodos a los lagartos monitores. Desde el monitor enano más pequeño hasta el dragón de Komodo, los dientes funcionan de la misma manera. Por lo tanto, los monitores se pueden comparar bastante favorablemente con animales extintos como los dinosaurios terópodos en función de esta similitud de funciones, aunque no estén estrechamente relacionados”, explicó Derek Larson, experto del Royal BC Museum en Canadá.

Dientes más bien pequeños

Según Thomas Cullen, de la Universidad de Auburn y autor principal del estudio, la investigación “muestra que, en realidad, los dientes no eran atípicamente grandes. Incluso los dientes gigantes de los tiranosaurios son proporcionalmente similares en tamaño a los de los lagartos depredadores vivos en comparación con el tamaño del cráneo, rechazando la idea de que sus dientes eran demasiado grandes para cubrirlos con los labios”.

“Algunos opinan que no tenemos idea sobre la apariencia de los dinosaurios más allá de las características básicas como la cantidad de dedos de manos y pies. Pero nuestro estudio, y otros similares, muestran que manejamos cada vez mejor muchos aspectos de la apariencia de los dinosaurios. Lejos de no tener ni idea, ahora estamos en un punto en el que podemos decir 'oh, ¿eso no tiene labios? ¿O cierto tipo de escama o pluma? Entonces esa es una representación tan realista de esa especie como un tigre sin rayas», agregó Mark Witton, de la Universidad de Portsmouth.