Crean un casco de realidad virtual capaz de aniquilar al usuario real si muere en un juego virtual
Palmer Luckey, excéntrico multimillonario y fundador de Oculus VR, compañía que hoy pertenece a Meta, desarrolló un casco de realidad virtual capaz de hacer estallar la cabeza del usuario, literalmente, si pierde durante un videojuego.
Tecnología y guerra
Considerado un verdadero prodigio en materia de realidad virtual, Luckey construyó su primer dispositivo VR, el Oculus Rift, cuando tan solo tenía 16 años de edad, y poco tiempo después fundó su propia empresa de realidad virtual, Oculus VR, la que finalmente vendió a Facebook en 2014.
A partir de 2017, fundó una startup de defensa llamada Anduril, dedicada al diseño y fabricación de armamento y vehículos de grado militar, campo dentro del cual adquirió conocimientos que hoy, a raíz de su nuevo invento, le permitió desarrollar acaso una de las ideas más descabelladas.
"This might be a game, but it is not something you play."
— Palmer Luckey (@PalmerLuckey) November 6, 2022
To commemorate the Sword Art Online Incident of November 6th 2022, I made the OQPNVG, the first virtual reality device capable of killing the user - if you die in the game, you die in real life.https://t.co/F3nkP5EU61
Recientemente, Luckey presentó un mortífero casco de realidad virtual, que incluye un visor equipado con bombas que estallan cuando detecta que el jugador real ha muerto en la virtualidad del juego en el que participa.
Un casco extremo
“Usé tres de los módulos de carga explosiva que suelo usar para un proyecto diferente, vinculándolos a un fotosensor de banda estrecha que puede detectar cuando la pantalla parpadea en rojo a una frecuencia específica, haciendo que la integración del juego por parte del desarrollador sea muy fácil. Cuando se muestra una pantalla apropiada de finalización del juego, las cargas se disparan y destruyen instantáneamente el cerebro del usuario”, ecplicó Luckey.
“La idea de vincular tu vida real a tu avatar virtual siempre me ha fascinado: instantáneamente elevas las apuestas al máximo nivel y obligas a las personas a repensar fundamentalmente cómo interactúan con el mundo virtual y los jugadores dentro de él”, concluyó Luckey.