Alexa, el asistente virtual de Amazon, podrá imitar la voz de familiares fallecidos

Alexa, nombre del asistente virtual de Amazon, comenzará a imitar la voz de cualquier miembro familiar, incluso si ya falleció, mediante una asombrosa función que se encuentra en pleno desarrollo y que fue presentada durante la conferencia Re:Mars que la compañía ofreció en Las Vegas.

Con tan solo una muestra

Según detalló Rohit Prasad, vicepresidente senior y director científico de Alexa, la función pretende establecer una mayor confianza en las interacciones que los usuarios establecen con el asistente virtual mediante la inclusión de “atributos humanos de empatía y afecto”, como la imitación de cualquier voz, para lo cual bastará con brindar una muestra, por ejemplo una grabación, de menos de un minuto.

“Estos atributos se han vuelto más importantes durante la actual pandemia, cuando muchos de nosotros hemos perdido a nuestros seres queridos”, subrayó Prasad, al tiempo que agregó: “aunque la inteligencia artificial no puede eliminar el dolor de la pérdida, definitivamente puede hacer que los recuerdos perduren”.

Abuela, cuéntame un cuento

Durante el evento en Las Vegas, Amazon reprodujo un video en el que un niño pregunta: “Alexa, ¿puede la abuela terminar de leerme el Mago de Oz?’’ Inmediatamente, el asistente virtual de Amazon reconoce el pedido y cambia de voz para imitar a la abuela del pequeño mientras sigue con la lectura del libro.

Rohit Prasad explicó que para desarrollar la novedosa función, primero fue necesario aprender a realizar una “voz de alta calidad’’ con una grabación muchísimo más breve que las horas y horas de grabación en estudio, como sucedía hasta ahora para lograr la síntesis de las voces que Alexa emplea.

Ética y seguridad

Mientras tanto el desarrollo avanza, el anuncio suscitó diversos debates en torno a cuestiones éticas y especialmente de seguridad: Microsoft, competidor directo de Amazon, anuncio un límite a la oferta de voz sintética para “garantizar una participación activa” de la persona cuya voz se recrea.

“Esta tecnología tiene un emocionante potencial en el ámbito de la educación, la accesibilidad y el entretenimiento, pero también resulta fácil imaginar cómo podría utilizarse para suplantar a los oradores y engañar a los oyentes de forma inapropiada”, señaló Natasha Crampton, directora de la división de ética de la inteligencia artificial de Microsoft.