5 alimentos destruyen la inteligencia, según la Universidad de Harvard
La psiquiatra nutricional y profesora de la Universidad de Harvard, Uma Naidoo, afirmó que ciertos alimentos en la cotidianeidad de una persona podrían debilitar la memoria y concentración. Para evitar cualquier daño y llevar una dieta saludable con el fin de reducir el riesgo de sufrir demencia y deterioro cognitivo, la experta recomienda evitar los siguientes alimentos.
Azúcares añadidos
Muchos productos industriales están excedidos en azúcares añadidos, los cuales provocan un aumento de la glucosa, sustancia utilizada por el cerebro para producir energía y alimentar las actividades celulares. El consumo desmedido podría entorpecer los procesos de la mente y reducir el rendimiento cerebral, por lo cual es fundamental ingerir solamente lo necesario.
Productos fritos
Además de brindarle un sabor particular a los alimentos, el consumo de frituras proporciona una alta cantidad de calorías, grasas saturadas y otras sustancias nocivas para el cuerpo. De hecho, un estudio reciente reveló que el alto consumo de productos fritos está relacionado con las peores puntuaciones en materia de aprendizaje y la memoria.
Panificados y cereales refinados
La carga desmedida de glucémica, proveniente de los hidratos de carbono, puede encontrarse en productos diarios como el pan blanco, la papa o el arroz blanco. Los picos de azúcar en sangre que generan estos alimentos pueden derivar en enfermedades riesgosas, ya que son preparados con grano o harina refinada a la que se le ha despojado de los nutrientes.
Consumo de bebidas alcohólicas
Un informe publicado en la revista British Medical Journal en 2018, explicó que las personas que consumen más de 14 bebidas a la semana podrían tener un riesgo elevado de demencia, en comparación quienes beben moderadamente. De igual manera, los efectos nocivos que tiene sobre la memoria ya han sido comprobados, ya que algunas personas llegan a olvidar épocas completas.
Nitratos
Según un estudio reciente en psiquiatría nutricional, los nitratos, ingredientes utilizados para conservar y mejorar la pigmentación de las carnes frías, como tocino, salami y salchichas, podrían alterar las bacterias intestinales. En caso de suceder, la reacción química dentro del cuerpo podría inclinar la balanza hacia el trastorno bipolar.