Siete planetas del Sistema Solar comenzaron a girar en sentido contrario
Un enigma astronómico de larga data sigue sorprendiendo a los científicos: siete planetas del Sistema Solar han invertido su dirección de rotación, algo que parece desafiar las convenciones y en ocasiones genera incertidumbre sobre sus implicaciones. Aquí la explicación del fenómeno.
Movimiento retrógrado
El fenómeno denominado "movimiento retrógrado planetario" ha capturado históricamente el interés en la comunidad astronómica. Sin embargo, en esta ocasión, la atención se centra en un acontecimiento excepcional: siete planetas del Sistema Solar han experimentado un cambio en su dirección de rotación.
Normalmente, los planetas se desplazan hacia el este en su órbita en comparación con las estrellas fijas. Sin embargo, en ocasiones, parecen detenerse momentáneamente y cambiar temporalmente su dirección hacia el oeste durante varios meses, creando la ilusión de moverse en sentido contrario. Este intervalo seguido de un cambio de dirección es lo que los astrónomos llaman "movimiento retrógrado".
Los planetas en cuestión
Aunque históricamente Júpiter ha estado vinculado con este fenómeno, desde el 23 de agosto pasado, siete planetas de nuestro Sistema Solar han entrado en este curioso comportamiento. Mercurio, Venus, Neptuno, Saturno, Plutón, Urano y Júpiter participan en este intrigante movimiento celestial, desafiando en apariencia las leyes de la física.
De acuerdo con la NASA, el fenómeno de movimiento retrógrado no significa que un planeta esté retrocediendo físicamente en su órbita. En realidad, se trata de una ilusión generada por las relaciones de posición entre los planetas y la Tierra, además de sus movimientos alrededor del Sol.
También lunas
El fenómeno de movimiento retrógrado no se verifica exclusivamente en planetas, sino que también se observa en algunas lunas o satélites.
Aunque en su mayoría orbitan en la misma dirección que sus planetas, existen excepciones notables. Por ejemplo, Tritón, la luna más grande de Neptuno, orbita en una dirección opuesta a la de su planeta anfitrión.