Misterio en el espacio: la sonda Voyager 1 está enviando “datos imposibles”
Voyager1 y Voyager2 son dos naves espaciales que la NASA lanzó al espacio, en 1977, para estudiar detalladamente a los planetas Júpiter, Saturno y todos los que se sitúan más allá del sistema solar.
El 25 de agosto de 2012, la sonda Voyager1 alcanzó el espacio interestelar y así saltó a la historia como el primer objeto desarrollado por el ser humano que alcanza semejantes latitudes.
La NASA y el misterio de los mensajes imposibles
A una distancia de la Tierra que supera los 23 millones de kilómetros, la sonda Voyager1 permaneció en silencio durante los últimos tres años, hasta que repentinamente comenzó a enviar una serie de datos misteriosos, tanto, que mantienen en vilo a los expertos de la NASA.
Según precisó el equipo que lidera la investigación, mediante un comunicado en la página de la agencia espacial estadounidense, los datos que se están recibiendo no parecen guardar ninguna relación con lo que sucede a bordo de la sonda.
El comunicado explica que el sistema de control y articulación de actitud no está respondiendo en forma coherente y, en cambio, parce estar generando una serie de datos aleatoriamente, algo que podría ocurrir, pero no sin que antes se activen los sistemas de protección contra fallo de datos.
Mientras tanto, se especula con que el espacio interestelar en el que se encuentra inmersa la sonda Voyager es una región de alta radiación, algo que podría estar interfiriendo con el normal funcionamiento de la nave.
Desde la NASA, informaron que las tareas para intentar resolver el misterio continúan adelante.