Las nueve partes del alma humana según la antigua religión de Egipto
La compleja religión que primó durante los casi tres mil años del Antiguo Imperio Egipcio, consideraba que el alma humana estaba compuesta de nueve partes separadas, que juntas conformaban a un individuo.
Jb: así se llamaba al corazón, factor ligado al más allá. Se creía que esta parte se conformaba con una gota de sangre del corazón de la madre.
Shuyet: la sombra representaba la continuidad en la integridad del ser.
Ren: el nombre otorgado al nacer era el que definía la vida. Una persona existía conforme era nombrada.
Bâ: la personalidad resumía las cualidades que hacen que cada persona sea única y diferente a las demás.
Ka: La chispa vital era el factor que separaba a las personas vivas de las muertas.
Khat: el cuerpo físico es mencionado en la antigua mitología egipcia como el nexo entre el alma y la vida terrenal.
Akh: el ser inmortal representaba la unión mágica entre Ba, la personalidad y Ka, la chispa vital.
Sahu: el juez, el fantasma y el ser etéreo, capaz de integrarse con los demás aspectos de alma luego de ser juzgado tras la muerte.
Sechem: parte del alma ligada al poder vital capaz de lidiar con las circunstancias externas.
Fuente: codigooculto.com