La increíble historia del Balón de Oro de Maradona: robado, desaparecido durante décadas y aparecido en una feria
La reaparición de un Balón de Oro que Maradona ganó en 1986, que se creía robado y fundido, acaparó la portada de los diarios deportivos.
Más que una historia, una película
Este icónico trofeo ahora se encuentra en el centro de la escena, ya que una casa de subastas lo exhibirá hasta el 6 de junio. En esa fecha, un afortunado comprador tendrá la oportunidad de adquirir esta reliquia, cuya historia podría fácilmente inspirar una película o serie televisiva.
La saga del Balón de Oro robado de un banco en Nápoles en el pasado, el por qué Maradona y su círculo cercano llegaron a creer que su recuperación era una quimera, y cómo un ex galerista franco-argelino descubrió la esfera dorada en una suerte de feria, son elementos cruciales de esta fascinante historia.
Trofeo fundido
El 13 de noviembre de 1986, Diego Maradona recibió el prestigioso Balón de Oro en reconocimiento a su destacada actuación durante el Mundial de México. El trofeo, bañado en oro, permaneció en una caja fuerte ubicada en la sucursal del Banco de la Provincia de Nápoles. Sin embargo, tres años más tarde, la sede bancaria fue objeto de un audaz atraco perpetrado por lo que se conoció como "La Banda del Buco" (El agujero en italiano), llevado a cabo a plena luz del día.
Maradona, vinculado a la mafia en aquel entonces, intentó recuperar su Balón de Oro robado contactando a miembros del crimen organizado. Aunque ofreció pagar por su devolución, le dijeron que ya lo habían fundido. Sin embargo, en 2016 se demostró que el trofeo, hecho de latón y bañado en oro, no podía fundirse.
Milagrosa reaparición
Abdelhamid B., ex galerista franco-argelino aficionado a las subastas, descubrió el Balón de Oro en enero de 2016 en un modesto edificio de una sala de ventas. Originalmente buscaba una baratija para su suegro, pero encontró entre 150 trofeos el dorado Balón de Oro, que inicialmente creyó ser un premio de motocicletas.
Sin embargo, tras un año y medio y varias búsquedas en internet, se dio cuenta de su verdadera identidad gracias a artículos sobre el famoso robo en Nápoles en 1989 y los detalles de la fundición del trofeo. Dos defectos confirmaron su autenticidad como el premio robado a Maradona en 1986. El valor estimado del Balón de Oro recuperado oscila entre 12 y 15 millones de euros.