El tesoro del siglo: hallan más de un millón de dólares en oro
Los arqueólogos recuperaron un cuantioso tesoro de monedas de oro, perdidas en el fondo del mar desde 1715.
Naufragio español
En 1715, una flota española zarpó desde La Habana rumbo a España cargada con oro y plata del Nuevo Mundo. Estas riquezas, destinadas a financiar las campañas militares del imperio, nunca llegaron a su destino. Una tormenta tropical frente a las costas de Florida hundió 11 de los 12 barcos, dejando cientos de vidas y una fortuna estimada en más de 400 millones de dólares en el fondo del océano.
Este naufragio marcó el inicio de una búsqueda que atravesó los siglos. Diversos equipos de rescate intentaron recuperar el tesoro, pero la mayoría de los restos permanecieron inalcanzables. Fue recién en el siglo XXI que una familia de exploradores logró desenterrar parte de esta historia perdida, dando un giro inesperado al relato de las riquezas sumergidas.
Un hallazgo con secretos
En 2015, la familia Schmitt, especializada en rescates subacuáticos, encontró 51 monedas de oro y una cadena de más de 12 metros en el sitio del naufragio. Este hallazgo atrajo la atención internacional por su valor histórico y económico, pero pronto se descubrió que no todo había salido a la luz. Los Schmitt ocultaron deliberadamente otras 50 monedas, desatando sospechas sobre sus intenciones.
Investigaciones revelaron que Eric Schmitt había colocado tres monedas en el lecho marino para que inversores las “descubrieran” y vendió piezas a coleccionistas privados. Estas acciones no solo comprometieron la credibilidad de la familia, sino que también violaron las leyes de preservación histórica, generando un escándalo dentro del ámbito arqueológico.
Retorno de un tesoro perdido
Gracias a una investigación conjunta entre la Comisión de Conservación de Pesca y Vida Silvestre de Florida y el FBI, se recuperaron 37 de las monedas que habían sido sustraídas. Estas piezas, de un incalculable valor histórico, serán devueltas a sus custodios legales, mientras las autoridades trabajan para rastrear las 13 monedas restantes.
Este caso no solo resalta la importancia de preservar el patrimonio histórico, sino también la responsabilidad de quienes participan en su recuperación. Aunque parte del tesoro permanece perdido, este descubrimiento reafirma la fascinación que despiertan las historias de naufragios y los misterios que esconden las profundidades del océano.