Los rituales funerarios más extremos
Los rituales funerarios son, probablemente, una de las más elocuentes ilustraciones de la cultura humana, tan diversa y variada como las múltiples concepciones de la vida y la muerte, a lo largo del tiempo y las geografías.
A los ojos del occidente moderno, estos son algunos de los rituales más extremos:
-En Papúa Nueva Guinea, en el seno de la tribu Dani, ante la muerte de un familiar, los niños y las mujeres más cercanos al difunto demostraban su respetuoso dolor de una manera extrema, amputándose la falange de un dedo. Aunque la práctica fue prohibida, aún hoy existen familias que cumplen con este ritual.
-El ritual funerario de la tribu Toraja, en Indonesia, es tan complejo como extenso. Cuando uno de sus miembros muere, el cuerpo del difunto permanece en su casa durante meses, hasta que los preparativos del funeral estén completamente realizados. Finalmente, el día del entierro, se sacrifican dos búfalos y el cadáver es llevado en andas de los familiares hasta su última morada.
-En India, los Aghoris Sadhus, una vertiente del hinduismo que promueve y practica el canibalismo, celebra uno de los más escalofriantes rituales. Con la firme creencia de que así se obtienen grandes poderes físicos y mentales, cuando un cadáver es arrojado a las aguas del sagrado río Ganges, se sirven de él para comer su carne cruda.
-Algunas etnias aborígenes de Australia, creen que las virtudes del difunto pueden transmitirse directamente a los más jóvenes. Para ello, envuelven el cadáver con ramas, de modo que se embeban de los fluidos emanados durante la descomposición. Más tarde, usan las ramas húmedas para untar el cuerpo de los muchachos.
Fuente: supercurioso.com
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