La revolución audiovisual
En tan sólo diez años, el tamaño promedio del televisor aumentó un 200 por ciento, la oferta de programas pasó de algunas pocas alternativas a prácticamente un mar de contenidos, y ya no fue necesario estar disponible a una determinada hora para ver un determinado shows.
Desde los primeros televisores tubulares, carísimos y en blanco y negro, a la televisión color, no existieron muchas novedades. En realidad, las principales innovaciones estuvieron dadas en la producción de los contenidos y la proliferación de canales y cadenas de televisión.
Con la década de 1990 llegaron dos de los más grandes avances tecnológicos: por un lado, los televisores adoptaron un aspecto panorámico 16:9, como las pantallas de cine; por el otro, consonantemente, la televisión satelital revolucionó la manera de ver televisión.
En 2008, el mercado colombiano conoció por primera vez la Alta Definición, un concepto que se cristalizó bajo la sigla HD. DIRECTV fue pionero en la transmisión satelital de una variada oferta de programación, entre lo mejor del deporte, películas, series y muchos otros contenidos.
Ya hacia el año 2010, el formato FULL HD, con 1080 píxeles, se adueñó del mercado y la posibilidad de grabar cualquier programa para verlo más tarde, a través de sistemas digitales como el HD DVR, revolucionó el modo de consumir televisión.
Hoy DIRECTV sigue brindando emociones para toda la familia, con la mejor tecnología, permitiendo grabar, pausar o retroceder contenidos HD. Además, ofrece una increíble plataforma online para una experiencia emocionante, en cualquier momento y en cualquier lugar.
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