Elon Musk, el Tony Stark de nuestros días

Todas sus cualidades más notables son dignas de un héroe de la ficción; la suma de sus características más salientes hacen pensar, inevitablemente, en el famoso personaje Tony Stark, el Hombre de Hierro creado por el editor Stan Lee para Marvel. Pero sus millones de dólares y sus geniales inventos tienen lugar en el mundo real.

Entre otras cosas, Elon Musk inventó el servicio de pago PayPal, creó la compañía Tesla Motors, cuyo nombre homenajea a uno de sus modelos, el gran Nikola Tesla, y con la que fabrica automóviles eléctricos de última generación. También está a la vanguardia de la exploración espacial, comandando de Space X, que se convirtió en la primera compañía privada en volar al espacio, contratada por la NASA, y sostiene, entre otros proyectos filantrópicos, el Halcyon Molecular, un laboratorio de biotecnología abocado a la búsqueda de soluciones para enfermedades aún incurables.

Como casi todo héroe genial, Musk fue prodigio y un poco rebelde. A los 10 años reprogramó sin ayuda su computadora y a los 17 ya había programado íntegramente un videojuego. A los 24 abandonó las carreras universitarias de administración de empresas y física para fundar su propia compañía de servicios de Internet, la cual vendería, al poco tiempo, por más de 300 millones de dólares. En 2006 ganó el premio de Time Magazine al invento del año por el Tesla Roadster, que recién empezó a producirse dos años más tarde. Es pionero en materia de paneles fotovoltaicos y apoya todo tipo de emprendimiento vinculado al aprovechamiento de energías limpias.

En este momento, el Tony Stark del mundo real no descansa: se dedica al desarrollo de Hyperloop, un transporte que podría recorrer alrededor de 600 kilómetros en solo 35 minutos. Suena exagerado, pero Musk está acostumbrado: una vida llevando adelante proyectos que parecen imposibles ha templado el espíritu de este héroe de nuestro tiempo.

FUENTE: The Telegraph

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