La última batalla de los vikingos
Los vikingos son sinónimo de fuerza y bravura. Son innumerables las historias y canciones que relatan sus grandes hazañas, pero lo que no todos saben es que su época de oro terminó en territorio británico, cuando el famoso rey Harald III Hardrada de Noruega, invadió la isla tratando de apoderarse del trono inglés.
La invasión
El rey vikingo, con la ayuda de rebeldes británicos, reunió trescientos barcos, entre naves de guerra y embarcaciones de suministros, en los que agrupó un ejército de entre siete y nueve mil bravos vikingos, además de mercenarios frisios reclutados por Tostig, hermano del rey inglés Haroldo II, y dos mil soldados aportados por el rey Malcolm III de Escocia. La flota vikinga ingresó en Inglaterra a través de los ríos del norte, y vencieron toda resistencia que les salió al paso.
La batalla final
La invasión marchaba según los planes hasta que el rey Haroldo II asaltó por sorpresa el campamento vikingo con su ejército de 15 mil soldados y 2 mil jinetes. Cuentan los anales que la batalla que siguió en un lugar llamado Stamford Bridge fue sangrienta. El rey vikingo Harald III murió tras recibir un flechazo en el cuello y el resto de sus hombres siguió el mismo destino. El hijo del rey Harald pudo volver a Noruega, en donde reinó con el nombre de Olaf III “El Pacífico”, y así terminó la era de las invasiones vikingas.