Políticos Vs. Extraterrestres ¿Nos ocultan información?
Según algunas teorías, la humanidad todavía no conoce ninguna civilización fuera de la Tierra no porque no la haya, ni por falta de tecnología adecuada, sino, aunque parezca increíble, por falta de voluntad; teorías un poco más audaces señalan que no se trata de que falte voluntad, sino que existe la voluntad política de bloquear o despreciar toda investigación al respecto. Los principales culpables de esto, según el jefe de proyectos de SETI (Search for Extraterrestrial Intelligence), los responsables de que sigamos en la más absoluta e ignorante soledad cósmica, son los políticos. En palabras del propio Seth Shostak, quien publicó un artículo al respecto en el portal The Conversation, “ya hubiéramos podido encontrar vida extraterrestre, pero los políticos no tienen voluntad”.
Destaca que en las últimas dos décadas el telescopio Kepler de la NASA permitió descubrir miles de planetas que giran alrededor de otras estrellas; una de cada cinco de ellas puede tener un planeta cuyo tamaño y temperatura promedio sean los mismos que los de la Tierra, lo que equivale a decir que podrían tener atmósfera y agua líquida. Para Shostak, es sencillamente absurdo pensar que todos esos millones de mundos hipotéticamente habitables sean estériles.
El especialista menciona tres formas de detectar vida inteligente fuera de la Tierra, todas ellas obstaculizadas por la falta de financiamiento por parte de la clase política: la detección de efluvios de géiseres naturales y posterior perforación de gruesas capas de hielo que separan la superficie desde los mares que se encuentran por debajo (como podría hacerse en las lunas de Júpiter y Saturno); la aplicación de estereoscopia para analizar la composición de la atmósfera de los planetas; y, como hace SETI, la observación de señales de radio o las luces láser. Nada de todo esto es posible cuando el presupuesto de la NASA programado para el 2015 es menor a una milésima parte del presupuesto federal total de EE.UU. Shostak transmite la sensación de que no estaríamos tan lejos del paso más importante para la humanidad, pero hay quienes intentan evitarlo.
FUENTE E IMÁGENES
The Conversation; RT