Contacto extraterrestre: protocolos, leyes y reglamentos actualmente vigentes en el mundo
Si bien oficialmente aún no existe ningún contacto extraterrestre, sí existen legislaciones al respecto, que entre leyes, reglamentos y protocolos, ordenan qué hacer frente a un encuentro con civilizaciones alienígenas.
Astronautas en cuarentena: en caso de contacto extraterrestre, los astronautas que lo protagonicen deberán pasar un tiempo en cuarentena, a fin de evitar la posible introducción de bacterias contaminantes en el planeta.
El contacto extraterrestre debe ser inmediatamente reportado a la ONU: a partir del año 1967, cualquier astronauta que contacte con civilizaciones alienígenas tiene la obligación de reportar el hallazgo a las Naciones Unidas, antes que a cualquier otro organismo mundial.
Leyes marítimas que protegen de colonizaciones extraterrestres: las Naciones Unidas posee un Tratado para el espacio exterior, según el cual ningún ser humano o nación está facultado a apropiarse de un planeta. Algo similar existe en el caso inverso, basándose en tratados que regulan las aguas internacionales.
Los extraterrestres son considerados personas: desde hace varios años, Andrew Haley logró que los seres humanos desestimen cualquier posibilidad de dañar la vida alienígena, estableciendo que los extraterrestres tienen el mismo derecho a vivir que cualquiera de nosotros.
Astronautas embajadores de la raza humana: las Naciones Unidas establece que cualquier astronauta que contacte con civilizaciones alienígenas está obligado a comportarse como embajador de la raza humana y, por lo tanto, como nuestro representante.
Impuestos alienígenas: el Código Impositivo de los Estados Unidos establece que cualquier objeto elaborado en tierras estadounidenses, aunque sea vendido en el espacio exterior, está obligado a pagar impuestos, según la ley.
Un programa espacial para detectar vida alienígena: gracias a que Nikola Tesla sugirió que las ondas de radio podrían servir para contactar con extraterrestres, actualmente existe el programa SETI, orientado exclusivamente al contacto alienígeno a través de radiotelescopios.
La Tierra y su propio espacio: el ser humano es dueño no solamente del planeta Tierra, sino también del espacio que lo rodea. Así, cualquier civilización extraterrestre está incapacitada legalmente para proclamar como propio cualquiera de estos lugares.
Fuente: vix.com