Un pueblo medieval emerge de las aguas en Italia
Tras la decisión de fusionar dos lagos pequeños para dar paso a la construcción de un embalse hidroeléctrico, en 1950, el pueblo medieval de Curon, en el norte italiano, quedó sumergido bajo las aguas.
Pese a la oposición de sus habitantes, la construcción del embalse no se detuvo y los lagos Curon y Resia finalmente fueron fusionados en el contexto de la construcción de un dique que hoy mide seis kilómetros de largo y un kilómetro de ancho.
Resurgir entre las aguas
Tras el hundimiento de Curon bajo las aguas del nuevo lago artificial, el único edificio que permaneció visible es el campanario de la iglesia, construida en 1357. Sin embargo, las obras de mantenimiento y renovación obligaron a drenar el embalse y los restos del poblado medieval emergieron por primera vez en siete décadas
Fueron cientos los turistas que aprovecharon la ocasión para contemplar y fotografiar el histórico sitio, e incluso pudieron recorrer sus calles.