Hallan ocho momias y varios objetos preincaicos durante la ampliación de la red gas en Perú (IMÁGENES)
En Perú, un grupo de trabajadores que participaba en la expansión de una red de gas hizo un sorprendente hallazgo: encontraron los restos momificados de ocho individuos que se cree podrían remontarse a la época preincaica.
Cultura preincaica Ichma
Los restos humanos, envueltos en tejidos de algodón y sujetos con cuerdas tejidas de lianas, se encontraban a una profundidad de aproximadamente 30 centímetros bajo la superficie. Los arqueólogos creen que estos restos podrían tener vínculos con la cultura preincaica Ichma, que se originó alrededor del año 1100 d. C. y luego se integró al Imperio Inca a finales del siglo XV.
Al respecto, el arqueólogo Roberto Quispe informó que, de los ocho entierros, dos podrían corresponder a adultos y los otros seis a individuos más jóvenes. Junto a los restos humanos, se descubrieron pipas de opio y diversos objetos antiguos, entre los que podrían formar parte de un entierro ritual y pertenencias de los difuntos.
Una ciudad arqueológica
“Nosotros vamos recuperando esas hojas de la historia perdida de Lima que justamente se encuentra oculta debajo de las pistas y las calles”, afirmó Jesús Bahamonde, arqueólogo de Calidda, empresa dedicada a la distribución de gas natural en la capital, que cuenta con una población de 10 millones de habitantes.
En Lima, capital de Perú situada sobre el Pacífico sur, durante las labores de excavación para expandir la red subterránea, se han descubierto más de 1.900 hallazgos arqueológicos en un período de 19 años. La ciudad ha permanecido ocupada desde hace más de 10 milenios por culturas preincaicas, incaicas y habitantes modernos.
Restos de todas las épocas
“Cuando llegaron los españoles en el siglo XVI encontraron toda una población que vivía en los tres valles que hoy ocupan Lima... lo que tenemos es una suerte de continuación histórica”, explicó Bahamonde.
En 2018, Quispe y otros arqueólogos descubrieron tres ataúdes de madera bajo el suelo de una barriada llamada La Flor. Estos ataúdes contenían los cuerpos de tres inmigrantes chinos que habían sido enterrados en el siglo XIX y formaron parte de la gran ola de inmigración china a Perú en esa época.