Una tormenta solar podría colapsar internet durante semanas
Con cierta regularidad, del Sol emana una llamarada solar, compuesta por una corriente masiva de partículas energéticas que, al impactar contra el campo magnético terrestre, generan lo que se conoce como tormenta solar, un fenómeno capaz de afectar seriamente la funcionabilidad de los satélites e interferir las comunicaciones.
Una tormenta de categoría superior
Según un novedoso estudio presentado en la conferencia de comunicación de datos SIGCOMM 2021, cuando una tormenta solar adquiere características mayores, lo que ocurre aproximadamente una vez cada cien años, podría generar un apagón generalizado de internet durante semanas, e incluso meses.
Al respecto, Sangeetha Abdu Jyothi, científica en computación, profesora asistente de la Universidad de California y autora de la investigación, este evento astronómico es capaz de generar un “apocalipsis de internet”, dadas las catastróficas consecuencias que un apagón de internet podría tener en las formas de vida moderna.
A la espera de una gran tormenta solar
Hasta el momento, las últimas grandes tormentas solares han ocurrido en tiempos anteriores a la existencia de internet. No obstante ello, los efectos del fenómeno astronómico evidenciaron su potencial destructivo ya en 1859, cuando se generó una perturbación geomagnética lo suficientemente grave como para que los cables de telégrafo se incendiaran.
En 1989, aunque se trató de una tormenta solar de menor gravedad, las corrientes inducidas que produjo terminaron por afectar la red eléctrica de Quebec, en Canadá, dejando a la ciudad en completa oscuridad durante 9 horas.
El problema está en los repetidores
Hoy, las conexiones regionales y locales de internet están basadas en cables de fibra óptica, inmunes a los efectos de una tormenta solar. Sin embargo, los extensos cables submarinos, troncales para la infraestructura de internet, se interconectan cada 50 ó 100 kilómetros con repetidores que aumentan la señal óptica.
Según indica el estudio, las partículas magnetizadas que generan las tormentas solares sí afectan a los repetidores, que podrían quedar en desuso y afectar a todo el cable, incluso si tan solo uno solo resultara dañado. Si esto ocurriera, países e incluso continentes enteros podrían quedar sin internet durante un extenso período.