Un gigantesco rayo que ascendió desde la tierra hasta el borde del espacio, desconcierta a la ciencia
En el mes de mayo del año 2018, un equipo de científicos que sobrevolaba una fuerte tormenta eléctrica en Oklahoma, Estados Unidos, registró un gigantesco rayo eléctrico que, a diferencia de los habituales, brotó en sentido contrario, desde abajo, hacia arriba de las nubes, alcanzando la estratósfera con una luminosidad de tono azul.
Un mapa tridimensional
El análisis del este rayo permitió además saber que su carga eléctrica fue cien veces más que la de un rayo de tormenta promedio, lo que le permitió alcanzar nada menos que 80 kilómetros de largo en el aire, muy cerca del límite entre la estratósferay el espacio exterior.
New 3D study resulted from a fortuitous event and a multi-organization research team:@GeorgiaTech @TexasTech @UofNH @la_UPC @DukeU @UofOklahoma @NOAA @LosAlamosNatLab @USRAedu @ScienceAdvanceshttps://t.co/MtxbRxlAKD
— USRA (@USRAedu) August 4, 2022
Ahora, según publica la revista científica Science Advances, este tipo de rayos, que son gigantescos chorros de energía sobrecargados, logró ser cartografiado por primera vez y, según Levi Boggs, científico del Instituto de Investigación de Georgia Tech a cargo del estudio, fue creado un mapa tridimensional del chorro de Oklahoma.
"Pudimos cartografiar este gigantesco chorro en tres dimensiones con datos de muy alta calidad", aseguró Boggs, y detalló: "pudimos ver fuentes de muy alta frecuencia (VHF) por encima de la cima de la nube, que no se habían visto antes con este nivel de detalle. Utilizando datos de satélite y de radar, pudimos saber dónde se encontraba la parte líder muy caliente de la descarga por encima de la nube".