Inteligencia Artificial descubre un asteroide potencialmente peligroso en dirección a la Tierra

Un algoritmo desarrollado por científicos de la Universidad de Washington identificó su primer asteroide potencialmente peligroso para la Tierra. El asteroide, llamado 2022 SF289, tiene aproximadamente 182 metros de longitud y fue descubierto durante una prueba de control de inteligencia artificial con el programa ATLAS, en Hawái.

Buscando NEOs

El algoritmo HelioLinc3D, diseñado para descubrir asteroides cercanos a la Tierra, sorprendió a los científicos al detectar su primer asteroide "potencialmente peligroso" dirigido hacia el planeta Tierra, el asteroide 2022 SF289, durante una prueba inicial.

El asteroide 2022 SF289, identificado como potencialmente peligroso, no presenta una amenaza inmediata para la Tierra. Sin embargo, su detección es un logro relevante, ya que valida la eficacia de la IA HelioLinc3D en encontrar asteroides cercanos a la Tierra (Near Earth Objects o NEOs) con menos observaciones que los métodos actuales. La creación de este nuevo algoritmo más rápido para detectar NEOs es una noticia sobresaliente.

Para sentirnos más seguros

Identificar asteroides cercanos es un reto, incluso con telescopios como ATLAS de la Universidad de Hawái, que requieren varias capturas de imágenes del mismo trozo de cielo para detectarlos, algo que no resulta eficiente ni rápido.

"Al demostrar la efectividad en el mundo real del software que Rubin usará para buscar miles de asteroides potencialmente peligrosos aún desconocidos, el descubrimiento de 2022 SF289 nos hace a todos sentirnos más seguros", aseguró Ari Heinze, uno  de los científicos del observatorio Rubin.

Demostrada eficiencia

La eficiencia del nuevo algoritmo es crucial, ya que se estima que hay muchos más asteroides potencialmente peligrosos por descubrir. Especialmente, los que están a unas 20 veces la distancia de la Tierra a la Luna, merecen atención especial.

Se espera que el Observatorio Vera C. Rubin, ubicado en los Andes chilenos, se una a la búsqueda de asteroides potencialmente peligrosos en 2025 y revolucione la tasa de descubrimiento. Financiado por la Fundación Nacional de Ciencias y el Departamento de Energía, cuenta con un espejo de 8,4 metros y una cámara de 3.200 megapíxeles, superando la capacidad de los instrumentos actuales al escanear el cielo dos veces cada noche.