El extravagante plan de la NASA para regular la intimidad en el espacio
En 1992 dos astronautas del trasbordador espacial Endeavour se casaron semanas antes de la misión espacial para la que habían sido entrenados durante un año. Las autoridades de la NASA no vieron con buenos ojos el matrimonio pero tampoco pudieron suspender la misión. Hasta ese momento, no tenían un protocolo de comportamiento acerca de las relaciones íntimas de sus astronautas.
A partir de ese acontecimiento, la NASA modificó sus políticas de relaciones entre los astronautas que viajen al espacio. Las relaciones íntimas de los futuros tripulantes de naves espaciales, tanto en viajes científicos como turísticos, serán asuntos que deberán planificarse con anticipación, para prevenir un accidente en los interiores de las naves y asegurar el éxito de la misión espacial.
El tema de la sexualidad en el espacio será un asunto importante a tener cuando se popularicen los viajes espaciales turísticos y comerciales. Como se supone, en el futuro no todas las misiones serán comandadas por astronautas entrenados. Todo parece indicar que los viaje espaciales se popularizarán en los próximos años, introduciendo un nuevo concepto de turista espacial.
Investigadores canadienses ofrecieron una solución a la falta de afecto de los astronautas en el espacio. Para satisfacer las necesidades íntimas de los astronautas, proponen el uso de robots sexuales o “erobots”. Los mismos ofrecen la oportunidad de tener relaciones íntimas en el espacio, adaptándose a las necesidades específicas de cada de uno de sus usuarios y podrían representar una solución práctica a las necesidades humanas en la futura exploración espacial.
Fuente: elconfidencial.com
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