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El enigmático fenómeno de las piedras vivas: respiran, crecen y se reproducen

Por History Channel Latinoamérica el 16 de Noviembre de 2017 a las 11:53 HS
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En Rumania, más precisamente en el poblado de Costeti, un fenómeno tan raro como intrigante se ha transformado en el principal atractivo turístico del lugar: las piedras vivas. Localmente denominadas Trovants, o "piedras que crecen" en rumano, estas piedras tienen un aspecto generalmente normal. Sin embargo, el estudio de los minerales que las componen ha demostrado algunos detalles que las hacen ser únicas en el mundo.

 

 

 

Según los expertos, estas piedras tienen más de 6 millones de años de antigüedad y habrían surgido al mundo como pequeños guijarros para más tarde alcanzar tamaños de hasta 10 metros. No se trata de un crecimiento abrupto, sino que demoran mil años en crecer tan sólo 4 o 5 centímetros.

 

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Para averiguar cómo es que este fenómeno de crecimiento funciona, los científicos diseccionaron algunos ejemplares. Una vez abiertas, hallaron una estructura muy similar a la de los árboles y los anillos circulares que conforman el tronco. De hecho, así fue posible estimar la edad de algunas muestras.

 

 

 

 

"Las trovants están formadas por arena sedimentada de una cuenca formada hace seis millones de años. Junto a las arenas se han acumulado carbonatos en exceso, que cuando llueve presionan a las capas inferiores de sedimentos y las hacen aflorar hacia el exterior creando las protuberancias", señalaron desde el Museo Trovant.

 

 

Muchos investigadores sugieren que, a través de procesos que acontecen a escala microscópica, las piedras podrían "reproducirse e incluso respirar". También sostienen que, si se emplea equipamiento especializado de alta sensibilidad, es posible detectar un extraño pulso en su interior.

Por si todo ello no fuese lo suficientemente extraño, estas piedras son capaces de moverse y de hecho lo hacen a razón de 2.5 milímetros cada 15 días. Algo que obedecería al mismo fenómeno por el cual crecen, haciendo que se inclinen hacia adelante. La suma de estas características, ha llevado a creer, al menos a algunos científicos, que las piedras "son formas de vida de silicio con una conciencia propia".


Fuente: infobae.com