El Tratado de Lisboa fue un acuerdo de paz concertado entre España y Portugal, firmado en Lisboa el 13 de febrero de 1668 y ratificado en Madrid el 23 de febrero del mismo año. Después de 28 años de luchas, agotados ambos contendientes, solicitaron la mediación de Carlos II de Inglaterra, bajo cuyos auspicios se firmó la paz de Lisboa, por la cual España reconoció la independencia de Portugal y se le restituyó las plazas, Braga y Porto, que habían sido conquistadas e invadidas por el ejercito español bajo el mando del duque de Alba Fernando Álvarez de Toledo, el único territorio que quedó bajo el dominio de España fue Ceuta.