Descubren al verdadero culpable de la matanza de Pearl Harbor
La mañana del 7 de diciembre de 1941 ocupa un lugar predominante en los libros de Historia. 353 aeronaves niponas, entre cazas, bombarderos y torpederos, acribillaron la base naval estadounidense de Pearl Harbor, Hawái. Este episodio sobrevive como uno de los más significativos de la Segunda Guerra Mundial, pues desencadenó la entrada definitiva de Estados Unidos en la guerra. La controversia regresó de la mano de un informe que apoya la creencia de que el emperador Hirohito tuvo un papel más importante en las hostilidades que se llevaron adelante.
Pearl Harbor se convirtió en el objetivo de este ataque, el cual se desarrolló a través de dos oleadas, planteado como una operación que buscaba neutralizar a la U.S. Navy desplegada en el Pacífico y, así, proteger el avance de Japón hacia recursos naturales como el petróleo presente en la Malasia británica y en las Indias Orientales Neerlandesas. En definitiva, auxiliar los planes militares del Imperio en el Sureste Asiático.
Las consecuencias fueron desastrosas para los Estados Unidos. En total, 8 acorazados fueron atacados junto a varios cruceros de guerra y destructores, que se sumaron a los 188 aviones destruidos y la apabullante cifra de 2.400 bajas humanas. Por el lado agresor únicamente se contabilizaron casi 80 muertos y cerca de 30 cazas derribados.
Por su carácter sorpresivo, sin declaración de guerra ni aviso previo, la sangría infligida por Japón a EE.UU. fue calificada por Roosevelt como “el día de la infamia”. A Hirohito se lo presentó de manera formal como víctima de una deriva militar en Japón. Sin embargo, estudios modernos avalan que su responsabilidad sobre las decisiones fue mayor que la que en un principio se le supuso. La nota recientemente publicada por el periódico Yomiuri acredita este otro punto de vista, que el tiempo ha terminado dando la razón.
Fuente: ABC
Imagen: Shutterstock