Hallan la suela de una sandalia romana data en 2 mil años de antigüedad (FOTOS)
Lucus Asturum, ubicado en la actual Lugo de Llanera en Asturias, es citado como mansio en el Anónimo de Rávena, una obra recopilada por un cosmógrafo cristiano. En este contexto, "mansio" denota un lugar designado para que los viajeros descansaran durante sus trayectos, resaltando así la relevancia de Lucus Asturum como punto de parada en las antiguas rutas romanas.
Lucus Asturum, integrado en la administración romana como parte de la provincia Tarraconense y, posteriormente, de la provincia de Gallaecia desde la época de Diocleciano, desempeñó un papel crucial en Asturias entre los siglos I y IV d.C. La ciudad era un punto central estratégico, siendo el punto de origen de una ruta romana que la conectaba con Cantabria y otra que se dirigía hacia Asturica Augusta (Astorga).
Expedición a las profundidades
Desde 2016, un grupo de investigadores ha estado llevando a cabo excavaciones en la Eria de La Castañera, una finca en las afueras de la población. Recientemente, en el interior de un pozo descubierto en 2021, los arqueólogos realizaron un hallazgo asombroso: la suela de una sandalia de cuero que data de aproximadamente dos mil años atrás, de la época romana.
En 2018, los investigadores utilizaron el sistema LiDAR en sus exploraciones, lo que les permitió identificar un complejo termal en una finca cercana a la actual zona de excavación. Allí descubrieron vajillas de vidrio y fragmentos de cerámica que, según los expertos, probablemente fueron fabricados en la Bética, el valle del Ebro, el sur de la Galia y en Lucus Augusti.
Hallazgo único
En 2023, el hallazgo de la suela de la sandalia ha añadido un componente adicional a estos significativos descubrimientos. Aunque pueda parecer modesto, se trata de un hallazgo excepcional, ya que la suela está adornada con círculos, óvalos y figuras falciformes. Estas decoraciones la convierten en un descubrimiento único, ya que solo se conocen veinte sandalias de época romana en Hispania y ninguna de ellas presenta decoraciones similares.
Los expertos consideran que este tesoro de valor incalculable ha llegado hasta nuestros días porque a alguien que trabajaba en el pozo se le quedó atrapada la sandalia y no pudo recuperarla. Esperanza Martín, la directora de la excavación, expresó su entusiasmo al afirmar que "encontrar cuero conservado es algo absolutamente anómalo, muy excepcional".
La preservación excepcional de la suela de la sandalia se debe principalmente a la anoxia, la ausencia de oxígeno, que ha impedido la proliferación de microorganismos. Este fenómeno ha contribuido a que la sandalia se conserve en un estado óptimo.