El camarero mexicano que presenció la muerte de Robert Kennedy
Pasaron cuarenta años de la madrugada en la que el senador de los Estados Unidos y hermano del fallecido presidente John F. Kennedy, Robert F. Kennedy, fuera asesinado en el Hotel Ambassador de Los Ángeles, por el joven inmigrante palestino Sirhan Sirhan. Esa noche, Robert se encontraba de gira en California, participando de las internas demócratas como precandidato presidencial.
El 5 de junio de 1968 el mexicano Juan Romero, que entonces tenía 17 años, trabajaba como asistente de camarero en el hotel. En el momento en que se produjeron los disparos, el joven se había acercado hasta el senador para estrechar su mano, por lo que fue él quien socorrió al político durante sus últimos momentos con vida.
“Me arrodillé junto a él y puse mi mano entre el frío concreto y su cabeza solo para que estuviera cómodo”, contó Romero en una entrevista. “Podía ver sus labios moviéndose, así que me acerqué y le escuché decir '¿Está todo el mundo bien?' Yo le dije 'Sí, todo el mundo esta bien'. Podía sentir el flujo de la sangre entre mis dedos”, agregó.
Durante más de cuatro décadas Romero vivió con culpa por no haber logrado evitar el asesinato. “Con frecuencia la gente dice que estuve en el lugar correcto a la hora indicada…No, el lugar correcto y la hora indicada habría sido que yo hubiera sido el baleado”, confesó.
Fuente: bbc.com
Imagen: Wikimedia Commons U.S. News & World Report, Warren K. Leffler