Construían una autopista en Colombia y hallaron algo que sorprendió a los arqueólogos

En el marco de la construcción y mejoramiento de la autopista 4G Villavicencio-Yopal, en Colombia, fueron realizados una serie de importantes hallazgos que llevaron a la región, de escaso interés arqueológico, a ser una de las excavaciones más enormes del país, comprendiendo unas 10 hectáreas en donde fueron descubiertas 334 piezas unas 9 toneladas de líticos y piezas cerámicas, de comunidades prehispánicas que habitaron la región de los Llanos Orientales. Así, desde 2018 a la fecha, el Instituto Colombiano de Antropología e Historia identificó 55 sitios de interés arqueológico en municipio como los de Restrepo, Cumaral (Meta), Paratebueno (Cundinamarca) y Monterrey (Casanare).

Miguel Vargas, gerente de la concesionaria Covioriente, a cargo del proyecto, aseguró que “los trabajos realizados permitieron no solo salvaguardar los vestigios que se encontraban en la zona de influencia del proyecto, sino que la amplitud de las excavaciones que cubren varios municipios y departamentos trajo consigo la posibilidad de conocer y estudiar las sociedades prehispánicas que ocuparon la región. Es la primera vez que se recupera de manera sistemática tanta información sobre los grupos humanos que vivieron en los Llanos Orientales de Colombia, con lo cual el concesionario realizará grandes inversiones para hacer los estudios necesarios con el fin de generar un gran valor cultural y potencial turístico para la región”.

Búsqueda

El arqueólogo Juan Carlos Rubiano, coordinador de arqueología de Covioriente, destacó que “son proyectos constructivos que cubren mayores áreas, tanto obras relacionadas con hidrocarburos como de vías. Eso vino transformando en los últimos años la imagen que se tenía del Llano”.

De este modo, fue posible saber que en el corredor Villavicencio-Yopal no solo pulularon grupos nómades, sino que estuvo habitado por grandes asentamientos: “se pensaba que estas áreas de vivienda estaban fundamentalmente en zonas altas, protegiéndose de las inundaciones y de todos los procesos propios de los ríos en la región, pero lo que se identificó, por ejemplo, en el marco del proyecto del corredor vial, es que hay muchos yacimientos, sobre todo en el departamento del Meta, que quedan en zonas bajas, inundables”, detalló el arqueólogo.

”Ahora vemos sociedades mucho más sedentarias, que tenían pequeñas aldeas, varias agrupaciones de casas alrededor de algunos sitios puntuales, aunque también existían patrones de ocupación de viviendas aisladas. Se están evidenciando sociedades más complejas de lo que se tenía pensado hasta hace muy poco tiempo”, explicó.

Lo que se halló hasta el momento

Los trabajos permitieron identificar un gran número de cerámica rojo inciso y patrones de ocupación de civilizaciones que datan de los años 800 y 500 a. C., hasta el 1500 d. C. Durante el proceso de búsqueda, se movieron manualmente unos 69 mil metros cúbicos de tierra, tarea que requirió de 434 trabajadores, la gran mayoría de las regiones involucradas.

”Eso generó que hoy en día se tenga personal de la región que esté muy capacitado sobre cómo hacer excavaciones de manera detallada, cómo proteger los vestigios, qué hacer si se encuentran algo; pueden saber si son tempranos, si son tardíos”, precisó Rubiano. Los trabajadores fueron guiados por 20 arqueólogos.

Por delante está la próxima fase investigativa, que involucrará análisis de laboratorio y la micro-excavación de varios recipientes, para dar con elementos de importancia para el análisis.