Qué pasa después de morir: el sorprendente hallazgo de un nuevo estudio científico
Investigadores de la Universidad de Michigan, analizaron la actividad cerebral de pacientes moribundos, antes, durante y después de la muerte, para descubrir que el cerebro se activa inexplicablemente durante esta transición y da lugar a fenómenos descritos por personas que padecieron momentáneamente la muerte clínica.
Aumento de la actividad cerebral
Investigadores de la Universidad de Michigan, en Estados Unidos, descubrieron que, al momento de morir, se verifica un aumento inusual de la actividad cerebral muy similar al observado durante los sueños, las alucinaciones de pacientes que convulsionan y las experiencias "fuera del cuerpo".
Según los científicos, los hallazgos del novedoso estudio podrían ayudar a dar explicación a las experiencias "cercanas a la muerte" que históricamente han sido recopiladas a través del testimonio de una quinta parte de las personas que sobrevivieron a un paro cardíaco, más allá de su cultura o religión.
Experiencia de muerte
El equipo científico analizó las funciones cardíaca y cerebral de cuatro pacientes moribundos, más precisamente en coma, después de que el soporte vital les fuera retirado, mediante señales de electrocardiograma (ECG) y electroencefalograma (EEG), según detalla el estudio publicado por la revista científica The Proceedings of the National Academy of Sciences.
Así, verificaron un rápido aumento de la actividad cerebral en una región conocida como la "zona caliente": "la percepción interna de luz brillante o rostros familiares informados por sobrevivientes de muerte clínica sugiere una capacidad preservada en el cerebro moribundo para procesar la visión generada internamente", concluyen los científicos en su estudio.
Paradoja científica
"Cómo la experiencia vívida puede surgir de un cerebro disfuncional durante el proceso de morir es una paradoja neurocientífica", alerta el el Dr. George Mashou, coautor del estudio, "sin embargo, los hallazgos observados son definitivamente emocionantes y proporcionan un nuevo marco para nuestra comprensión de la conciencia encubierta en los humanos moribundos".
"La evidencia empírica presentada en este estudio sugiere fuertemente que el cerebro humano moribundo puede activarse", destaca el equipo científico, "puede servir como sistema modelo para explorar los mecanismos de la conciencia humana".