Encuentran en Polonia la tumba de un “niño vampiro” enterrado boca abajo
Arqueólogos de la Universidad Nicolás Copérnico de Torun, Polonia, revelaron el hallazgo de los restos de un niño, enterrado boca abajo, en el pueblo de Pien, en el sureste del país. Además, en la tumba del siglo XVII, se encontró también un extraño candado, por lo que los expertos creen que quienes enterraron al niño, de entre 5 y 7 años, estaban convencidos de que éste era un vampiro.
Dispositivos contra los vampiros
El dispositivo 'antivampiros' es un candado de forma triangular que se utilizaba en esa época para evitar que los vampiros volvieran a la vida y salieran de su tumba. El año pasado se encontró otra tumba cerca de esta, en donde yacía una “mujer vampiro” con una hoz en el cuello.
¿Eran vampiros?
Los arqueólogos creen que la tumba del “niño vampiro” fue profanada, ya que el esqueleto estaba incompleto. Además, aclaran que, en aquella época, muchas personas fueron señaladas como vampiros por tener algún rasgo inusual, un comportamiento extraño, o incluso por alguna enfermedad. Por eso terminaban siendo apartados de la sociedad, aún después de morir, y se los enterraba en lugares prohibidos y con dispositivos ‘antivampiros’ para asegurarse de que no volvieran de entre los muertos.