La Batalla de las Pirámides tuvo como fecha el 21 de julio de 1798 entre el ejército francés en Egipto bajo las órdenes del militar Napoleón Bonaparte y las fuerzas locales mamelucas (esclavos de origen turco). El enfrentamiento se produjo por las ambiciones de Bonaparte de conquistar y dominar los territorios de Oriente Medio. Tras la batalla, Francia se apoderó de El Cairo y el bajo Egipto. Después de oír las noticias de la derrota de su legendaria caballería, el ejército mameluco de El Cairo se dispersó a Siria para reorganizarse y contra atacar, pero no hubo éxito. La batalla significó el fin de 700 años de mandato mameluco en Egipto. A pesar de este gran comienzo, la posterior intervención del almirante británico Horacio Nelson 10 días después acabó con las esperanzas de Bonaparte de dominar Oriente Medio.