El 1 de febrero de 1974, en horas de la mañana, un incendio que se originó en el piso 12 y se expandió rápidamente hasta alcanzar los 25 pisos del Edificio Joelma, dejó un saldo de 188 personas fallecidas y 280 heridos, dando lugar a una de las peores tragedias de Brasil y la peor en la historia edilicia de San Pablo.
Ese día, los 25 pisos del conocido Edificio Joelma, situado en el 225 de la Avenida 9 de julio de la ciudad de San Pablo, en Brasil, ardieron sin remedio, pues la construcción carecía de alarmas contra incendio, rociadores, luces o salidas de emergencia, y los sistemas de aire acondicionado habían demostrado una enorme cantidad de averías desde su instalación.
Tras el incendio, el edificio Joelma permaneció cerrado durante cuatro años hasta ser completamente restaurado, aunque manteniendo su estructura fundamental, y fue reinaugurado con el nombre Praça da Bandeira, sinónimo hoy de la peor tragedia a nivel mundial en edificios de altura, con excepción del atentado a las Torres Gemelas de Nueva York.