El 2 de abril de 2005, el mundo lamentó la pérdida de uno de los líderes religiosos más influyentes de la historia moderna: el Papa Juan Pablo II.
Juan Pablo II, cuyo nombre de nacimiento era Karol Józef Wojtyła, fue un líder carismático que desempeñó un papel crucial en la historia reciente de la Iglesia Católica y en los asuntos mundiales.
Durante sus casi 27 años de pontificado, viajó incansablemente por todo el mundo, llevando su mensaje de paz, justicia y reconciliación a millones de personas en todos los rincones del planeta.
Nacido en Polonia, Juan Pablo II fue el primer papa no italiano en más de 450 años y el primero de Europa del Este. Su papado estuvo marcado por su firme defensa de los derechos humanos, su lucha contra el comunismo en Europa del Este y su compromiso con el diálogo interreligioso.