Un día como hoy, del año 2016, en Arizona, Estados Unidos, fallecía Muhammad Ali, boxeador al que se considera uno de los mejores de la historia, de gran influencia entre las personas de su generación mediante la lucha política y social a favor de los afroamericanos y del islam.
Nacido con el nombre de Cassius Marcellus Clay Jr. y reconocido en los albores de su carrera profesional como Cassius Clay, Muhammad Ali se destacó en el boxeo desde la etapa amateur, cuando conquistó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Roma 1960.
Ya en la era profesional, obtuvo el título de campeón indiscutido de la categoría de los pesos pesados, en 1964, cuando apenas contaba con 22 años de edad. Sobre el final de su carrera, se erigió como el único boxeador en conquistar tres veces el campeonato lineal (1964, 1974 y 1978) e indiscutido (1964, 1967 y 1974) de peso pesado.
Además, fue el primer boxeador que conquistó cuatro veces un título mundial de peso pesado (de la Asociación Mundial de Boxeo) en 1964, 1967, 1974 y 1978, caracterizado siempre por un estilo único y muy alejado de las técnicas tradicionales de la época. Así combatió contra algunos de los mejores boxeadores del momento, como Archie Moore, Henry Cooper, Sonny Liston, Floyd Patterson, Ernie Terrell, Joe Frazier, George Foreman y Ken Norton.
A partir de 1960, cuando se rehusó al reclutamiento por parte de las fuerzas armadas de su país durante la guerra de Vietnam, Ali se trasformó en una figura pública de gran influencia social, especialmente después de involucrarse activamente en la organización religiosa de la Nación del Islam.
A lo largo de su carrera, y después del retiro, recibió múltiples premios y reconocimientos, entre los que se destacan la Medalla Presidencial de la Libertad, el ingreso al Salón Internacional de la Fama del Boxeo, el título de «Rey del Boxeo» del Consejo Mundial de Boxeo y «Deportista del Siglo XX» de Sports Illustrated y la BBC.
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