El hallazgo maya que obliga a replantear la historia de la civilización olmeca
En Tabasco, México, un grupo de arqueólogos descubrió en 2017 un nuevo yacimiento, Aguada Fénix, oculto bajo la tierra. Hasta ese momento, se creía que la civilización maya se había desarrollado gradualmente, con pequeñas aldeas que surgieron durante el período Preclásico Medio. Mediante la datación por radiocarbono, estimaron que esta estructura fue construida entre 1.000 y 800 a. C.
A diferencia de otros sitios arqueológicos de períodos cercanos, como la cultura olmeca, Aguada Fénix no tiene indicadores claros de marcada desigualdad social, como esculturas de individuos de alto estatus. La extensa meseta y las grandes calzadas sugieren que el monumento fue construido para ser utilizado por muchas personas.
Este sitio guarda similitudes con el antiguo centro de civilización olmeca de San Lorenzo, al oeste en el estado mexicano de Veracruz. Pero la falta de esculturas de piedra relacionadas con gobernantes y élites, como cabezas colosales y tronos, implicaría que el trabajo comunitario fue importante en el desarrollo inicial de la civilización maya.
"Este tipo de comprensión nos da importantes implicaciones sobre la capacidad humana y el potencial de los grupos humanos. Es posible que no se necesite necesariamente un gobierno bien organizado para llevar a cabo este tipo de grandes proyectos. Las personas pueden trabajar juntas para lograr resultados sorprendentes", aseguró el arqueólogo Takeshi Inomata.
Fuente: eldiario.es
Imágenes: Shutterstock / eldiario.es