¿Quién fue Franklin D. Roosevelt? Biografía y acciones políticas
Franklin D. Roosevelt atravesaba su segundo mandato como gobernador de Nueva York, cuando fue electo presidente número 32 de los Estados Unidos, en 1932.
Con el país sumido en la Gran Depresión, Roosevelt actuó rápidamente para restaurar la confianza pública, proclamó un feriado bancario, y habló directamente con los ciudadanos mediante una serie de transmisiones radiales.
La ambiciosa lista de programas y reformas comprendidas en su New Deal (Nuevo Trato) redefinió el rol del gobierno federal en la vida de los estadounidenses.
Tras ser reelegido por cómodos márgenes en 1936, 1940 y 1944, Roosevelt sacó a Estados Unidos del aislacionismo y lo llevó a la victoria sobre la Alemania nazi y sus aliados en la Segunda Guerra Mundial.
En tiempos de guerra, encabezó una exitosa alianza entre Gran Bretaña, la Unión Soviética y Estados Unidos, y ayudó a sentar las bases de la organización de paz de posguerra que más tarde se convertiría en las Naciones Unidas.
Roosevelt, el único presidente estadounidense en la historia que fue elegido cuatro veces, murió mientras se desempeñaba en el cargo, en abril de 1945.
Biografía temprana
Nacido el 30 de enero de 1882, en una enorme propiedad cercana al pueblo de Hyde Park, Nueva York, Franklin Delano Roosevelt fue el único hijo de James y Sara Delano Roosevelt, una rica familia estadounidense.
Educado por tutores privados y escuelas de élite, desde pequeño sintió admiración por su primo quinto, Theodore Roosevelt, elegido presidente en 1901, a quien intentó emular durante su carrera política.
Mientras estaba en la universidad, Franklin se enamoró de la sobrina de Theodore, Anna Eleanor Roosevelt, con quien se casó en 1905. La pareja tuvo una hija, Anna Roosevelt, y cuatro hijos que sobrevivieron hasta la edad adulta: James Roosevelt, Franklin D. Roosevelt Jr., Elliott Roosevelt y Jr., John A .Roosevelt. Un quinto hijo llamado Franklin D. Roosevelt, Jr. murió en la infancia.
Roosevelt asistió a la facultad de derecho en la Universidad de Columbia y trabajó durante varios años como empleado en un bufete de abogados de Wall Street. En 1910, ingresó a la política, ganando un escaño en el Senado estatal como demócrata en el condado de Dutchess, de tinte republicano.
En 1913, el presidente Woodrow Wilson nombró a Roosevelt subsecretario de la Marina de los Estados Unidos, puesto que mantendría durante los siguientes siete años, viajando a Europa en 1918 para recorrer bases navales y campos de batalla, tras la entrada de Estados Unidos en la Primera Guerra Mundial.
Poliomielitis y elección como gobernador
En 1921, cuando tenía 39 años, a Roosevelt le diagnosticaron poliomielitis. Incapaz de caminar, se apartó temporalmente de la vida pública y se avocó con energías a su rehabilitación. Durante varios meses, nadó sistemáticamente tres veces por semana en su piscina hasta recuperar la fuerza. En 1922, con ayuda de aparatos ortopédicos, volvió a ponerse de pie.
En 1924, viajó a Warm Springs, Georgia, con la esperanza de ser curado por las aguas minerales de un manantial. Terminó comprando el complejo y convirtiéndolo en un centro de rehabilitación para pacientes de poliomielitis.
Con el apoyo de su esposa y su partidario desde hacía mucho tiempo, el periodista Louis Howe, Roosevelt comenzó a regresar a la vida pública, emitiendo declaraciones sobre temas de actualidad y manteniendo correspondencia con los líderes demócratas.
Eleanor Roosevelt habló públicamente en todo el estado de Nueva York, manteniendo fuerte la reputación de su esposo a pesar de la enfermedad, y también organizó la división de mujeres del Partido Demócrata.
En 1924, Roosevelt apareció públicamente en la Convención Nacional Demócrata para nominar al gobernador de Nueva York Alfred E. Smith a presidente, aunque Smith perdió la nominación y los demócratas fueron derrotados en elecciones generales.
Nominó a Smith nuevamente en 1928, esta vez con éxito, y a instancias suyas aceptó postularse para gobernador de Nueva York. Smith perdió ante Herbert Hoover, pero Roosevelt ganó.
El gobernador Roosevelt se volvió más liberal en sus políticas, a medida que Nueva York y los Estados Unidos se hundían más en la depresión económica generada por el colapso de la bolsa de valores, en 1929.
Fue entonces que estableció la Administración Federal de Ayuda para Emergencias (TERA, por sus siglas en inglés), con el objetivo de dar trabajo a los desempleados, y que hacia 1932 ya ayudaba a casi una de cada diez familias neoyorkinas.
Roosevelt en la Casa Blanca
Reelegido como gobernador en 1930, Roosevelt emergió como favorito para la nominación presidencial demócrata, dos años después. Yendo en contra de la tradición, se apersonó en Chicago para aceptar la nominación, prometiéndose a sí mismo "un nuevo acuerdo para el pueblo estadounidense".
En las elecciones generales, Roosevelt triunfó por un margen abrumador sobre Hoover, cuya imagen se había convertido en un símbolo de la Gran Depresión para muchas personas. Además, los demócratas obtuvieron mayorías considerables tanto en la Cámara de Representantes como en el Senado.
Cuando Roosevelt asumió el cargo, el 4 de marzo de 1933, la Depresión había alcanzado niveles desesperados, con 13 millones de desempleados. En su discurso inaugural, Roosevelt declaró: "esta gran nación perdurará como ha resistido, revivirá y prosperará [...] lo único que debemos temer es el miedo mismo".
Roosevelt inició su presidencia con el cierre de todos los bancos durante varios días hasta que el Congreso lograra aprobar una reforma legislativa. También comenzó a dar conferencias de prensa y discursos de radio a nivel nacional en los que hablaba directamente al pueblo estadounidense.
La primera de estas emisiones radiales, sobre la crisis bancaria, fue escuchada por unos 60 millones de estadounidenses y contribuyó en gran medida a restaurar la confianza del público y prevenir corridas bancarias dañinas.
Después de la aprobación de la Ley de Emergencia Bancaria, tres de cada cuatro bancos abrieron durante el transcurso de una semana.
El gran objetivo del New Deal
Entre otras medidas clave en los primeros cien días de gobierno, fueron creados algunos de los programas e instituciones más importantes del New Deal de Roosevelt, incluida la Administración de Ajuste Agrícola, la Administración de Obras Públicas, el Cuerpo Civil de Conservación y la Autoridad del Valle de Tennessee.
Además de los programas destinados a brindar alivio económico a los trabajadores y agricultores, y a crear empleos para los desempleados, Roosevelt también inició una serie de reformas del sistema financiero, especialmente con la creación de la Corporación Federal de Seguros de Depósitos para proteger las cuentas de los depositantes y la Comisión Nacional del Mercado de Valores para regular el mercado y prevenir abusos como los que llevaron al colapso de 1929.
En 1935, después de que la economía comenzara a mostrar signos de recuperación, Roosevelt pidió al Congreso que aprobara una nueva ola de reformas, conocida como "Segundo New Deal". Entre otras, sin incluyó la Ley del Seguro Social y la Administración del progreso de las obras.
El Congreso, liderado por los demócratas, también elevó los impuestos a las grandes corporaciones y a las personas adineradas.
Reelección de Roosevelt
Polémico pero extremadamente popular entre los votantes, Roosevelt ganó la reelección por un gran margen, en 1936, sobre el gobernador de Kansas Alfred M. Landons.
Se enfrentó a la oposición de la Corte Suprema por sus programas del New Deal y propuso una expansión de la corte que le permitiría nombrar un nuevo juez por cada juez de 70 años o más, algo que el Congreso rechazó y que supuso el mayor revés en la carrera d Roosevelt.
Los disturbios laborales y otra recesión económica, en 1937, perjudicaron los índices de aprobación de Roosevelt. Sin embargo, los republicanos ganaron terreno en las elecciones legislativas de mitad de período y pronto formaron una alianza con los demócratas conservadores que bloquearía nuevas reformas legislativas.
A fines de 1938, cuando el apoyo al New Deal disminuía, Roosevelt enfrentó un nuevo desafío, esta vez en el escenario internacional.
Segunda Guerra Mundial
Ya en 1937, Roosevelt advirtió al público estadounidense sobre los peligros planteados por los regímenes de línea dura en Alemania, Italia y Japón, aunque no llegó a sugerir que Estados Unidos debía abandonar su política aislacionista.
Sin embargo, tras el estallido de la Segunda Guerra Mundial, en septiembre de 1939, Roosevelt convocó una sesión extraordinaria del Congreso para revisar las leyes de neutralidad vigentes en el país y permitir que Gran Bretaña y Francia compren armas estadounidenses.
Con la ocupación alemana de Francia, a fines de junio de 1940, Roosevelt persuadió al Congreso para que brindara mayor apoyo a Gran Bretaña, ahora destinada a combatir la amenaza nazi por su propia cuenta.
Yendo en contra de la tradición de dos mandatos para los presidentes reelectos desde la época de George Washington, Roosevelt decidió postularse nuevamente para la reelección en 1940, en las que derrotó a Wendell L. Wilkie por casi 5 millones de votos.
Roosevelt aumentó su apoyo a Gran Bretaña con la aprobación de la Ley de Préstamo y Arriendo, en marzo de 1941, y se reunió con el primer ministro Winston Churchill a bordo de un acorazado anclado frente a Canadá, en agosto.
Así fue elaborada la Carta del Atlántico, en la que ambos líderes declararon las “Cuatro Libertades” sobre las que debería basarse el mundo de la posguerra: Libertad de expresión, Libertad de culto o de creencias, Libertad de vivir sin penuria y Libertad de vivir sin miedo.
El 8 de diciembre de 1941, el día después de que Japón bombardeó la base naval estadounidense en Pearl Harbor, Roosevelt compareció ante una sesión conjunta del Congreso, que declaró la guerra a Japón.
Roosevelt, primer presidente en abandonar el país durante la guerra, encabezó la alianza entre países que lucharon contra el Eje, reuniéndose frecuentemente con Churchill y buscando establecer relaciones amistosas con la Unión Soviética y su líder, Joseph Stalin.
Mientras tanto, hablaba constantemente en la radio, informaba sobre eventos de guerra y reunía al pueblo estadounidense en torno al apoyo del esfuerzo bélico.
Conferencia de Yalta y muerte de Franklin D. Roosevelt
En 1944, cuando la marea de la guerra se volvió hacia los aliados, un Roosevelt cansado y enfermo logró ganar las elecciones para un cuarto mandato en la Casa Blanca. En febrero siguiente, se reunió con Churchill y Stalin en la Conferencia de Yalta, en la que consiguió el compromiso de Stalin para entrar en la guerra contra Japón tras la inminente rendición de Alemania.
Los "Tres Grandes", como se llamó a los líderes aliados, también trabajaron para sentar las bases de la organización de paz internacional de posguerra que posteriormente se convertiría en las Naciones Unidas.
Cuando Roosevelt finalmente regresó de Yalta, estaba tan débil que debió sentarse mientras se dirigía al Congreso por primera vez en su presidencia.
Durante los primeros días de abril de 1945, abandonó Washington y viajó a su casa de campo de Warm Springs, en Georgia, donde mucho antes había establecido una fundación sin fines de lucro para ayudar a los pacientes de polio.
Allí, Roosevelt sufrió una hemorragia cerebral masiva y murió el 12 de abril de 1945.